El daño de los demás
Es inevitable que nos dañen otras personas. Nosotros mismos dañamos a los demás cuando nos domina cualquier emoción destructiva como el enfado o la envidia.
Necesitamos planificar cómo gestionar el daño. En esta meditación abordamos una manera de sanar la experiencia personal de sentirse herido y dañado por otros. Se trata de sanarse uno mismo. Con Atención plena, Conciencia y Compasión.